Alberto Fernández instó a los demás miembros del Mercosur a llevar adelante de manera conjunta cualquier tipo de Tratados de Libre Comercio con otros países. “¿Por qué no pensamos en nosotros, en lo que somos, un espacio único”, enfatizó.
El presidente Alberto Fernández ratificó que las negociaciones del Mercosur con países extrazona deben llevarse a cabo en forma conjunta por los países miembro, en medio de la tensión desatada dentro del bloque por la decisión de su par de Uruguay, Luis Lacalle Pou, de avanzar en un acuerdo con China de manera individual.
En su discurso en la Cumbre de Jefes de Estado, que se realizó en el Centro de Convenciones de la Conmebol, en la ciudad paraguaya de Luque, Fernández no rechazó la posibilidad de que el bloque negocie con China un acuerdo de libre comercio e, incluso, instó a llevarla adelante de manera conjunta, en base a lo que establecen los tratados constitutivos del Mercosur
El Presidente argentino dijo que “así como hicimos con (el acuerdo con) Singapur”, se podría analizar “la posibilidad de insistir en que China tuviera un acuerdo con el Mercosur”.
“¿Por qué no lo analizamos juntos, por qué no vemos la factibilidad juntos?”, dijo Fernández sobre la posibilidad de que el bloque inicie negociaciones con China.
“¿Por qué no pensamos en nosotros, en lo que somos, un espacio único”, como elemento distintivo para llevar adelante las negociaciones, añadió.
Los problemas en la relación de Uruguay con los otros tres países del bloque quedaron en evidencia en el habitual comunicado de Prensa que se da a conocer al final de cada cumbre, que en esta oportunidad no fue suscripto por el gobierno oriental.
En ese comunicado, que sirve de síntesis de lo considerado en los dos días de deliberaciones, los presidentes Fernández y Mario Abdo Benítez, de Paraguay, más los representantes de Brasil -en ausencia de Jair Bolsonaro- y de Bolivia -como Estado asociado- advirtieron sobre “las consecuencias producidas por el conflicto en Ucrania” en la economía del planeta en general y sobre el bloque en particular, además de destacar como avances de la sexagésima cumbre la rebaja del Arancel Externo Común (AEC) y la culminación de las negociaciones para sellar un acuerdo con Singapur.
El acuerdo con Singapur fue resaltado por Benítez en declaraciones a la prensa, en la que destacó que “desde 2010 que el Mercosur no había podido culminar un acuerdo de libre comercio que esté vigente”, en referencia al suscripto entonces con Egipto, ya que el firmado en 2019 con la Unión Europea aún no está operativo.
Los jefes de Estados “debatieron sobre las consecuencias producidas por el conflicto en Ucrania en los países del bloque, incluyendo entre ellas los efectos de las sanciones en los mercados internacionales de alimentos, de energía y en el acceso a insumos y fertilizantes e intercambiaron información respecto a las medidas tomadas para atenuar el impacto económico y social generado por el conflicto”, indicó el comunicado final del encuentro.
También se destacó que “se culminaron las negociaciones con Singapur, que se constituirá en el primer acuerdo comercial del Mercosur con un Estado del Sudeste Asiático”.
“Con más de 14 capítulos y anexos se adoptaron compromisos y estándares basados en prácticas de última generación, los que propiciarán un incremento de los flujos de comercio y de inversión”, añadieron los jefes de Estado.
“¿Por qué no lo analizamos juntos, por qué no vemos la factibilidad juntos?”
Alberto Fernández
Asimismo, ponderaron la firma de la Decisión 8/22 del Consejo del Mercado Común que “permitirá una reducción horizontal del 10% en las alícuotas del Arancel Externo Común (AEC), beneficiando tanto a los consumidores, que tendrán acceso a mayor variedad de productos a precios competitivos, como al sector productivo que tendrá acceso ampliado a insumos, con costos competitivos”.
Entre otros puntos, rescataron los avances en relación con la actualización del Régimen de Origen Mercosur (ROM), “con el fin de lograr la modernización de este instrumento esencial para la integración de los sectores productivos de nuestros países, buscando simplificar las reglas y adaptarlas a la actual realidad del comercio internacional”.
También destacaron la realización de la VIII Edición del Foro Empresarial del bloque, “que permitió dar una visión general del sector, con énfasis en las oportunidades regionales de desarrollo de la industria y de las potencialidades específicas de cada país”.
En el marco de las deliberaciones, funcionarios de los ministerios de Economía y los bancos centrales acordaron retomar la coordinación macroeconómica que se había dejado de lado durante la pandemia, a raíz de la aceleración inflacionaria.
Por último, se avanzó en la adopción de mecanismos de solución de controversias entre empresas del bloque.